El hocico les sirve para husmear, para sostener los bigotes, para comer y para demostrar que son benévolos y simpáticos. También tienen una cola peluda que les sirve para alimentar el orgullo. Justificado por otra parte, porque ¿qué sería de un hurón sin el orgullo de ser un hurón? Su característica congénita es la prudencia pero con el tiempo van adquiriendo otra que es la sabiduría. Para ellos todo el mundo es rojo porque tienen los ojos de ese color, que es el más adecuado para los hurones. Les interesan muchísimo la ingeniería y la música. Tienen ciertos dones adivinatorios y les gustaría volar pero hasta ahora no han hecho el intento porque la prudencia se los impide.
Angélica Gorodischer, "El fin de una dinastía o Historia natural de los hurones".
Como la demás fauna de Pasmaria, los hurones tienden a elevarse en los aires. Basta con ver aquí. Y aquí.
1 comentario:
¡Weeeeeee! ¡Hurones voladores! ¡Weeeeeeee!
Publicar un comentario