"Si se les demuestra a las amplias masas que el robo es el fundamento de la constitución de los Estados en su totalidad y de las relaciones exteriores entre los Estados, y que también por robos interiores y empresas de botín pueden ser arrebatados los resultados obtenidos por el trabajo y por la función social...", entonces se acaba toda la ética del trabajo y su acción conservadora en la sociedad.
Mannheim pone aquí de manifiesto una consecuencia peligrosa de la doctrina de la inmoralidad del Estado; a saber: que dicha doctrina no puede ser monopolizada por el estado, sino que también otros grupos más reducidos, otros grupos pseudopúblicos se apoderarán de ella para ponerla en práctica.
3/28/2012
huizinga y mannheim
Huizinga cita y comenta al Mannheim de "Hombre y sociedad en una época de reconstrucción". Entre las sombras del mañana (1935).
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2 comentarios:
Esto me hace pensar otra cosa: que la idea de dominar por la fuerza el espacio público tampoco puede ser monopolizada por el Estado. Porque cuando el Estado se vale de la fuerza (ejércitos, armas) para hacer valer su ley, otros grupos más reducidos pero que también tienen acceso a ejércitos y armas pueden apoderarse de la idea y ponerla en práctica.
El Estado presupone un uso de la fuerza, el problema es que valga sólo por su fuerza (fuerza que otros pueden acumular, o quedarse con la del estado si traen mucha prisa). Mannheim llamaba a esto el principio de "Chinga, ¿por qué nomás tú?". Claro que él lo decía en alemán.
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