4/02/2009

la pepsi vampiro

Esta mañana había un vendaval. Las persianas y las puestas temblaban, yo dormía veinte minutos, luego pasaba otros diez despierto y vuelta a empezar. En una de esas cabezeadas soñé con la Pepsi vampiro.

Estaba en el balcón de un hotel, viendo una ciudad que no conozco. Había luna llena y un silencio perfecto. Unos puntitos aparecieron en el círculo de la luna y comenzaron a acercarse. Eran un montón de murciélagos de cuerda. No se les veía el mecanismo, pero no volaban como animales ni como máquinas de alta tecnología, sino que se estremecían como juguetes de cuerda. Uno de los murciélagos se separo de la formación y se dirigió hacia mi balcón. Aterrizó en el centro del cuarto con la misma torpeza con la que lo hacen los albatros en los documentales (no sabemos, podría ser simple miedo a la cámara, capaz que solitos aterrizan bien chido). Las alas dejaron de vibrar: el murciélago de plástico se abrió en dos y dejó ver en su interior una Pepsi, fría y lista para tomarse. Desperté antes de poder abrirla.

3 comentarios:

Renato dijo...

Te iba a decir "¡no mames!", pero pensándolo bien la publicidad de la Pepsi es así de mamona, así que tu sueño resulta estar muy a la altura.

Ya no te alimentes después de la medianoche (o disminuye el consumo de ajenjo, me cae que te hace daño).

No falta sensatez en tu sueño. A las pepsis también les hace daño la luz del sol (tómate una pepsi asoleada y verás). Deben descansar en su envase original. No entrarán a tu casa si no las invitas. No chupan sangre, pero te echan a perder los riñones.

arturo dijo...

Ya sabes. Cobra caro. Una producción de esas le va a costar un tanate a Pepsi. Visualízate haciendo la mejor de las ofertas. Es una super idea.

Marcelo Dance dijo...

Me imagino una especie de Pepsi Black, algo así como una alternativa a la Coca Zero.
Ideal para tribus urbanas oscuras.
Ofrecé la idea antes que te la roben...
Yo te avisé!