11/29/2006

yo, el peor de todos

Como recordará quien no tenga nada mejor que hacer, la ultima vez que mencioné a Santo Tomás (a fuerzas recuperó su santidad, sigue sin armarse caballero) fue a propósito de su iniciación en los misterios del amor con Luneta, el esperado advenimiento de una camada de gatitos y la inevitable castración del culpable.

Eso fue hace tres meses y el embarazo jamás llegó. Quien quiera superar mi vileza deberá presentar pruebas, y aún así no podrá ganarme la primicia. Hoy, ante todos los presentes, patento como forma inédita de la ignominia y la crueldad humanas la castración de un gato estéril.

11/23/2006

cartografía

1. En días anteriores estuve leyendo El palacio de los sueños, de Ismaíl Kadaré. El 19 de noviembre llegué a la página en que Mark Alem por fin empieza a trabajar en el Tabir Saray o Palacio de los Sueños. El primer paquete de sueños que le entregaron para leer estaba fechado 19 de noviembre.

2. Ha pasado como una década desde la última vez que leí algo de García Márquez. Una de las últimas cosas que le leí fue Noticia de un secuestro, como negocio. Es decir, leí e hice un resumen para una estudiante, a cambio de una cantidad que ya no recuerdo. No había vuelto a pensar en ello hasta ese mismo día, el 19. Poco después recibí un mensaje de una amiga que citaba, en otro contexto, una frase de ese libro: "Dios no nos hace nada que no somos capaces de aguantar".

3. La última vez que en Stylus Magazine publicaron una lista de películas también se tejió un mapa y lo consigné en este espacio. En este momento no me pondré a buscarlo, pero prometo hacerlo más tarde y crear una etiqueta, "Cartografía", para este tipo de entradas.

Lo de esta ocasión va así: publicaron una lista titulada Out of Sight II, de "grandes películas olvidadas", en la que incluyen Chimes at Midnight (1965), una de Orson Welles sobre Falstaff de la que no tenía idea. Poco después, mi lectura de Mañana en la batalla piensa en mí llegó a estas líneas.

Entré en el salón y puse la televisión para el niño con el volumen bajo, así al menos oiría algo; la dejé en un canal en el que había aún imagen, otra película en aquel momento, la reconocí en seguida, Campanadas a medianoche, el mundo entero en blanco y negro de madrugada.


En la nota de Stylus se comenta que uno de los pocos lugares donde se ha reeditado esta película es, precisamente, España.

colder: entrevista a marc nguyen

Hace cuatro años Marc Nguyen, parisino de ascendencia vietnamita, se tomó unas vacaciones en su labor como diseñador gráfico y videoasta (entre sus clientes están Comme des Garçons y Kenzo) para crear canciones con estructura cíclica y una clara fascinación por el post-punk, el krautrock y el dub. Su proyecto se llama Colder y hasta la fecha ha grabado dos discos, Again (2003) y Heat (2005), ambos producidos por Norscq (Jean-Louis Morgère, de The Grief) y publicados por el sello británico Output, la casa europea de LCD Soundsystem y The Rapture, desaparecida hace apenas unos meses.

Imeca Music acaba de sacar la edición mexicana de Heat (con dos canciones nuevas como bonus) y para promocionarlo organizó presentaciones de Colder en el Distrito Federal, Puebla y Monterrey. A esta última plaza llegó Marc Nguyen el 19 de noviembre en condiciones adversas: hubo dificultades con el equipo de sonido del McMullens y un público más frío que el nombre de la banda. Inconvenientes de tocar una noche de domingo y con poca difusión.

Nguyen afrontó el reto y ofreció una sesión breve pero profesional, al final de la cual pude realizar esta breve entrevista. Sabiendo que él se encarga de toda la música en el estudio de grabación, esperaba ver a un chico escondido detrás de un teclado, su laptop y una caja de ritmos, pero llegó con un grupo de apoyo (guitarra, bajo y batería), así que mi primera pregunta fue referente a esa alineación.

Tus discos suenan intimistas, compuestos y grabados sin compañía, pero en el escenario tienes una banda completa. ¿Con cuál de esos dos formatos te identificas más?

Nunca he sido admirador de las bandas que hacen exactamente lo mismo en disco y en vivo. Desde el inicio la idea de Colder era proponer algo diferente en vivo, es más personal en los discos y más abierto en el escenario. Durante la creación y grabación de cada track es un proyecto electrónico, interpretado por una sola persona, pero en esencia son sonidos para un grupo completo, así que tiene sentido el cambio en vivo.

Apareciste en pleno renacimiento del post-punk. Tu música también apunta a los primeros ochenta, pero sin encajar del todo en esa oleada de bandas. ¿Cómo explicas tus diferencias?

Compartimos influencias, pero asimiladas de modos diferentes. Veo a Colder al margen de todo el revival post-punk, para empezar porque no hago esto sólo por el gusto de recrear un sonido de años atrás. Lo principal es ofrecer sentimientos y experiencias propias, después vienen las influencias y estilos.

Sueles mencionar a Einstürzende Neubauten y Coil entre tus favoritos. ¿Cuál fue tu reacción a la muerte de John Balance?

Fue algo muy triste, para mí Coil era uno de los grandes grupos de los ochenta, noventa y lo que va del nuevo siglo. El final de Coil es una gran pérdida para la música.

¿Dónde escucharemos tu música ahora, tras la desaparición de Output Recordings?

Todavía no estoy seguro, tengo algunas pistas pero no podría hablar de ello hasta que se confirme. En esta zona estoy con Imeca Music. Es el primer sello que me invita a Latinoamérica, son ellos quienes nos han abierto las puertas aquí. Ahora, además, corrieron el riesgo de traernos a tocar a la Ciudad de México y otras partes del país. Espero, en un futuro cercano, poder tocar en Brasil, Colombia o Argentina.

¿Estás planeando un nuevo disco?

Sí, para el próximo año. Será un poco distinto, menos electrónico. Todavía no está listo, así que sería difícil describirlo.

11/16/2006

el viaje de pedro al oeste


Durante la madrugada el Sr. Sagaz soñó la mejor película mexicana de todos los tiempos. No era una película que existiera en el mundo real. Ni siquiera aparecían actores conocidos (y eso que en sueños uno cuenta con presupuesto ilimatado para superproducciones).

Soñó algunas secuencias de la película, pero también una revista donde venían fotos muy grandes de los escenarios, y los comentarios del director por televisión. Todo un gran despliegue de mercadotecnia onírica.

El título era El viaje de Pedro al Oeste, en otros momentos era sólo Pedro va al Oeste. Ocurría en una casa con pisos de arena, cada habitación era un arenero enorme. Eso estaba plagiado directamente de Stalker, pero en ningún momento se apareció un Tarkovsky soñado para reclamar.

Los muebles eran de marfil y todo parecía viejísimo pero elegante. En algún momento pasó flotando un sirviente robot, similar a los platillos de Milagro en la Calle 8. No es la primera vez que esos bichos aparecen en los sueños del Sr. Sagaz. En otras ocasiones han sido hostiles, pero esta vez la maquinita parecía bien domesticada.

En la casa vivían niños, niñas, mujeres jóvenes y ancianas, pero ningún hombre adulto. No había nada abiertamente erótico, pero las muchachas vestían cosas muy ligeras y el tono general era de despreocupación y placer. Los diálogos, ahora irrecuperables, eran más de película para televisión, incluso infantil. Sencillos, limpios, directos.

Los escenarios mostrados en la revista pertenecían a El viaje de Pedro al oeste, pero también de otras películas del mismo director. En una de las imágenes podía apreciarse un escenario nocturno del tamaño de todo un desierto, con monumentos de roca erguidos en mitad de la nada. Después, por TV, el director explicó que en realidad él era arquitecto y lo único que disfrutaba era la creación de los escenarios, lo de dirigir no le emocionaba.

Terminada la perorata del director, el Sr. Sagaz creyó despertar. Estaba en la casa de su madre y ella veía la TV. Él le contaba lo que había soñado, "la mejor película en la historia del cine mexicano". "Eso que soñaste se parece a la que estoy viendo ahorita -aquí la madre pronunciaba un título de film- yo creo que lo soñaste porque dormido escuchabas los diálogos". En eso, el Sr. Sagaz despertó realmente, en su habitación normal y sólida de la vigilia. Recordó todos los detalles durante algunos minutos. Ahora sólo conserva este bosquejo.

11/14/2006

que coma el armagedón

Ya le estaba dando el avión a la Encuesta Nacional de Lectura, pero es que está buenísima. Quién sabe si mide los índices de lectura, pero es un documento invaluable para medir el grado de simulación y chingatividad del prójimo en nuestra tierra. Las citas son del artículo de Gabriel Zaid en el último número de Letras Libres:

Los entrevistados que no leen dan varias explicaciones, la primera de las cuales (69%) es que no tienen tiempo. Pero el conjunto de los entrevistados considera que la gente no lee, en primer lugar, por falta de interés o flojera. Sólo el 9% dice que por falta de tiempo.


Es decir, "no leo porque no tengo tiempo, los demás no leen por huevones".

En la ciudad de México (DF y zona metropolitana), según la encuesta, se leen 4.6 libros al año: 64.7% comprados, 16.5% prestados por un amigo o familiar, 10.2% regalados, 5.4% prestados por una biblioteca y 1% fotocopiados. Esto daría 18.5 millones de habitantes x 76% de 12 años o más x 4.6 libros al año por 74.9% comprados o regalados = 48 millones de ejemplares vendidos en la ciudad de México el año 2005, lo cual parece exagerado.
En la sección amarilla del directorio telefónico 2005 de la ciudad de México, había unas 325 librerías. Si se les atribuye la venta de 48 millones de ejemplares, vendieron 150,000 ejemplares cada una, que es altísimo. Las 75 librerías de Educal, cuyo tamaño es superior al promedio, tenían como meta para el año 2004 vender 75,000 libros y artículos culturales en promedio.


Bueno, quizá están leyendo el mismo varias veces. "Güey, no le entendí al final del Código Da Vinci, deja me regreso a la página 1".

Los entrevistados que han hecho estudios universitarios o de posgrado dieron respuestas todavía más notables. Según la ENIGH 2004, hay 8.8 millones de mexicanos en esa situación privilegiada (incluye a los 2.8 millones de universitarios que no terminaron sus estudios). Pero el 18% (1.6 millones) dice que nunca ha ido a una librería; el 35% (3 millones), que no lee literatura en general; el 23% (2 millones), que no lee libros de ningún tipo; el 40% (3.5 millones), que no lee periódicos; el 48% (4.2 millones), que no lee revistas y el 7% (más de medio millón) que no lee nada: ni libros, ni periódicos, ni revistas. El 30% (2.6 millones) dice que no gasta en libros, el 16% (1.4 millones) que gasta menos de $300 al año. O sea que la mitad de los universitarios (cuatro millones) prácticamente no compra libros.


Pues claro. Si ya tengo un título, ¿para qué voy a leer más?

11/12/2006

electrónica en el teatro de la ciudad

La noche del 9 de noviembre tuvo lugar el 1er Festival de Música Experimental, en el foro al aire libre del Teatro de la Ciudad. El nombre padecía un exceso de ingenuidad y/o megalomanía, y el programa anunciado por el Festival del Barrio Antiguo no coincidía con el distribuido por las bandas, y las que al final se presentaron fueron menos, pero aun así el resultado fue satisfactorio. ¿Cómo puede dejar buen sabor una receta para el desastre? Pueden dar las gracias a Nebula 3, Orvonton y Uvi.lov.

Nébula 3, del sello tapatío Abolipop, es a su modo un triple salto mortal. Luego de años en la EBM y el electro que viste de negro (bajo el nombre Sueño de Luna), Israel Martínez dejó las mangas de fishnet y ahora factura una IDM que no descuida el gancho pop. Con guitarras y coros escondidos en su Mac, y cantando en vivo (en inglés, con temas como la ruptura y los choques culturales), fue el único acto de la noche que puso a bailar al público.

Orvonton (Carlos “P-chan” López, otro devoto de la lap) comenzó con el ambient y el noise que ya conocimos en el demo Tensión Superficial (2006) y su musicalización del film Metrópolis. Pocos minutos después se le sumó R Con R (del colectivo Emulación Aleatoria), y juntos confeccionaron una sesión que poco tenía que ver con la obra anterior de cada uno: samples de anuncios de los años cincuenta y secuencias de Tito Puente, servidos sobre una cama de clavos de breakcore. Los indecisos y los que francamente planeaban la fuga acabaron quedándose. Habrá que avisarles que este sonido no lo tenía Orvonton un mes antes, y que cambiará un mes después. P-chan lleva prisa.

Los otros que en el escenario rebasan las limitaciones de su demo son Uvi.lov, distanciándose poco a poco de la recurrente comparación con múm. Por lo pronto tenemos esos subidones de dream pop ambicioso, finales con sonido saturado e inflexiones vocales en la línea de Jamie Stewart, que sumados a un serrucho cantante los desmarcan del lugar común, sin negar el referente de los islandeses. La última canción (¿”Cuatro caracoles en una cesta”?) no recuerdo haberla escuchado antes, así que quizá hay nuevos tracks en preparación.

Su intervención (Pierre + Marie Curie cerrarían originalmente, pero se cayeron del cartel) terminó hacia la 1:30 de la mañana del viernes, hora a la que el público salió disparado a buscar los últimas cervezas del Barrio Antiguo, dejando a los músicos en una titánica levantadera de cables, trebejos y bocinas. La recomendación: enlacen estos proyectos en myspace.com para que estén al tanto de sus próximas apariciones.

11/10/2006

pasen a ver al hurón

Presentación del libro Criaturas de la noche: 10 cuentos mexicanos de horror. Lunes 13 de noviembre, 6:30 pm. En la Capilla Alfonsina de la UANL (frente a Rectoría). Con el Sr. Magnánimo, también conocido como Yasmín Santiago (1er lugar del concurso Criaturas de la Noche 2006) y Leticia Herrera. Entrada y alcoholes gratuitos.

Dice el Hurón que extorsione y haga promesas como de campaña con tal de llevar gente. Así que ya saben, si van el Sr. Magnánimo solucionará el asunto de la Huasteca en 15 minutos, el de Oaxaca en 10 y hará un delicioso pastel de carne en 5. Y además se pueden llevar un libro de la biblioteca de Alfonso Reyes, faltaba más.

11/06/2006

come, armageddon, come!

Ya me dan flojera los sermones para rescatar el libro y la lectura. Y los llamados a despertar la conciencia crítica siempre me han parecido más sopechosos que las campañas de Wal Mart (¡ese smiley tiene una motosierra!). Que la gente lea lo que quiera, o que no lea, o que encuentre la sabiduria en los videojuegos y sean santos anacoretas que jamás dejen su habitación, instalados en el nirvana del Play Station. Mejor para ellos y mejor para todos. Mientras no se metan en eso amenazados con una pistola en la sien, podemos decir que cada quien escoge lo que se merece y actúa en consecuencia.

Pero también estoy hasta la madre de la sociología de café, donde se sueltan estadísticas, tendencias y diagnósticos sin más referente que algo que alguien quizá leyó y a lo mejor entendió en una revista que acaso se llamaba así. Hay dos encuestas recientes, con nombre y fecha, para conservar en el bolsillo, para sacar en caso de emergencia si alguien se pone a evangelizar en el Vip's en los días por venir. La del IMJ es hermosa. Los bienpensantes se arrepentirán de haber excomulgado a los jóvenes noventeros por apáticos y autodestructivos. Los nuevos encima son ñoños. Que vivan México y "eso de la democracia".


La juventud mexicana es cada vez más conservadora, toma cada vez menos decisiones por sí misma y se preocupa poco por lo que ocurre fuera de su vida privada. Es el diagnóstico de José Antonio Pérez Islas, director de Investigación y Estudios del Instituto Mexicano de la Juventud (IMJ), tras conocer los resultados de la encuesta aplicada en el 2005 en todo el País entre mexicanos de 12 a 29 años.

"La encuesta pone en duda el mito de que la juventud es la portadora del cambio y la transformadora de las estructuras. La realidad es que tenemos una juventud muy conservadora", comentó en entrevista. La Encuesta Nacional de la Juventud arrojó que casi el 50 por ciento de los consultados se considera "católico practicanate", proporción que en el 2000 era de 39 por ciento.

El 44 por ciento declaró haber tenido relaciones sexuales, 11 por ciento menos que en la encuesta de hace seis años. Alrededor de 7 de 10 encuestados dijeron compartir los valores morales y religiosos de sus padres, así como sus puntos de vista sobre la educación, el trabajo y el dinero.

El aborto es injustificable para el 56 por ciento, la homosexualidad para el 49 por ciento y el divorcio para el 43 por ciento. Más de la mitad reprobó las relaciones sexuales fuera del matrimonio y el 60 por ciento el consumo de mariguana.
El Norte, 5 de noviembre de 2006.



De acuerdo con la Encuesta Nacional de Lectura 2006 (ENL), efectuada por iniciativa del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), en México se leen en promedio 2.9 libros al año. En tanto que 33.5 por ciento de las personas encuestadas dijeron no leer ningún libro al año. Ese porcentaje de 2.9 supera el 0.5 que hasta hace poco se manejaba oficial y extraoficialmente. Sin embargo, la situación no está para lanzar las campanas al vuelo. Por ejemplo: 40 por ciento de quienes declararon leer o haber leído alguna vez, no recordaron un título.

Entre ese universo de lectores, el libro más mencionado fue La Biblia (4 por ciento), seguido de Juventud en éxtasis (de Carlos Cuauhtémoc Sánchez), Don Quijote (Miguel de Cervantes) y Cien años de soledad (Gabriel García Márquez). Cada uno alcanzó 1.2 por ciento de las menciones. Otros de los títulos más mencionados fueron Cañitas, El Principito, Harry Potter y Volar sobre el pantano. Por tipo de lectura, la encuesta arroja los siguientes resultados: 42.5 por ciento de los entrevistados acostumbra (o acostumbraba) leer textos escolares; 22.2 por ciento, libros de historia; 18.7 por ciento, novelas; 16 por ciento, libros de superación personal; 14.7 lee biografías; 13.6, enciclopedias; 13.4 frecuenta libros científicos y técnicos; 11.3, cuentos, y 8.7 libros religiosos.

En el rubro de "Autopercepción y gusto por la lectura", 15.4 por ciento dio que le gusta mucho leer; 33.3 señaló simplemente que le gusta; a 36 por ciento le gusta "poco", y a 15.3 no le gusta leer. La mayor parte de quienes no lee (69 por ciento) lo atribuyeron a la "falta de tiempo"; 30.4 dijo que porque no les gusta; 19.1 prefiere otras actividades recreativas; sólo 14.6 dio como razón para no leer que "los libros y revistas cuestan mucho dinero".
La Jornada, sábado 28 de octubre de 2006.

"Leí un libro el año pasado, pero ya no me acuerdo cómo se llamaba... ¡ah, sí, El Quijote!". ¿Quién dice que para levantar los índices de lectura se requiere el abaratamiento de los libros y una reforma educativa? Basta con un puñado de ciudadanos patrañeros.

11/04/2006

hellblazer no. 221

John Constantine: I know a lot about art, but I don't know what I like.

Nicola White: I'd like a t-shirt with that on it. Could give it to critics at openings.

John Constantine: You should hang around. I'm coming out with gems like that all the time.

11/02/2006

azul, tóxico, con sabor a ceniza

1. Todavía entre sueños, el Señor Sagaz escuchó que Sonia le preguntaba algo. No entendió, o no recuerda si entendió, o entendió y por eso respondió lo que respondió: "azul".

Lo siguiente que hizo, un poco más despierto, fue relatarle lo que había estado soñando.

2. "Estábamos los dos en el Barrio Antiguo, en un bar diminuto, apenas un cuarto. Alambiques y toneles. Una señora me ofreció vino, dijo que era bueno, que aunque no fuera de Jalisco era bueno y me ofreció una copa. El contenido de la copa parecía vino tinto, pero sabía a shampoo. Le di un trago, otro, pensé en darle el avión a la mujer, decirle que sí, que su vino estaba bueno aunque no fuera de Jalisco. Pero me ganó el asco y confesé que aquello sabía a shampoo".

"Luego llegamos a un parque. Un zoológico sin jaulas, en pleno centro. Había guardias, vestidos de negro, pero no jaulas. No vimos a los demás animales, sólo al león, que en algún momento saltó por encima de mí para alcanzar un sitio más alto donde descansar. Eventualmente, el león bajó y atrapó mi mano derecha en sus fauces. En el sueño esto no era doloroso, sólo atemorizante. El león no mordía, no arrancaba, sólo mantenía mi mano dentro de su hocico. Yo estaba espantadísimo, tú buscabas ayuda. Finalmente, un guardia dijo 'tranquilo, cálmate y te dejará ir'. Así lo hice y así lo hizo el león"

4. —Entonces, a ti que no te compren tu león- dijo Sonia.
—¿Qué habías preguntado cuando respondí azul?
—No recuerdo, pero sí, dijiste que azul.

5. Esta tarde, en la Biblioteca, un chico pidió prácticamente todos los libros que había sobre vinos. Era un alumno de primer semestre, en realidad no tiene ninguna materia que lo haga investigar tanto. Ahí se pasó toda la tarde, con los libros vinateros abiertos y desperdigados sobre una mesa, leyendo.

—¿Qué buscas?
—El nombre de un vino. Era azul, sabía a ceniza y era tóxico. Lo prohibieron hace mucho, por eso, por tóxico.

Más tarde, el Sr. Sagaz escuchó al chico preguntando a la maestra de enología por el vino. "No, no tengo idea de qué estés hablando. Si lo encuentras, me avisas", dijo la mujer.