10/26/2009

otras casas de otros gatos

Irene ya me había contado que cuando las personas salimos al trabajo y la escuela los gatos se ocupan de sus tareas de gato, pero no le había preguntado a dónde iban. Ayer me contó que van a su casita de gatos.

Una casita de gatos se parece a un castillo, explicó mi sobrina, pero los cuartos son muy pequeños, tamaño gato. Cuando ya va a ser hora de que los personas regresen a casa, los felinos también dejan sus casas de gato para ir a pasar la noche en la casa de las personas.

Lo que todavía no me ha dicho Irene es por qué dice que tiene dos gatos. Ella tiene una gatita, Juli, pero cuando me cuenta sobre las labores de los felinos suele referise a sus dos gatos. Le pregunté si el segundo gato era el que tienen sus abuelos y dijo que no, que era su otro gato. Uno que nunca he visto.

A su edad yo tenia un gatito imaginario. Se llamaba Sífur y podía hacer todo lo que yo no podía, como dejar la mesa sin acabar de comer, o quedarse viendo la tele hasta tarde.

10/25/2009

we even use the same word

Mitsuko appeared with another pot of tea, and said something in Japanese. Chia found her ear-clip and put it on.
"You must have been exhausted," the ear-clip translated. Then Mitsuko said she was taking the day off from school, to be with Chia.
Chia decided to change the subject. "What's your brother like? How old is he?"
"Masahiko is seventeen," Mitsuko said. "He is a 'pathological-techno-fetishist-with-social-deficit'". This last all strung together like one word, indicating a concept that taxed the lexicon of the ear-clips. Chia wondered briefly if it would be worth running it trough her Sandbenders, whose translation functions updated automatically whenever she ported.
"A what?"
"Otaku," Mitsuko said carefully in Japanese. The translation burped its clumsy word string again.
"Oh," Chia said, "we have those. We even use the same word."

Idoru, William Gibson.

10/21/2009

piano magic - ovations

Estos días he estado escuchando nuevas canciones con la voz de Brendan Perry. No se trata de un trabajo como solista, menos de un regreso de Dead Can Dance. Son parte de Ovations, el nuevo disco de Piano Magic.

Una de las gracias de Piano Magic ha sido su capacidad para adoptar diferentes estilos. Esto fue más evidente en Disaffected (2005), lo tocabas y si la gente alrededor no lo conocía, podía pensar que se trataba de varios grupos. Uno que hacía synthpop, uno de rock, uno más siniestro y otro de folk.

Glen Johnson, el eje de la banda, decidió esquematizar las cosas durante 2006 y 2007. Creó el grupo Future Conditional para grabar We Don't Just Disappear, con canciones de electropop. Los discos de Piano Magic fueron divididos por género: el pop etéreo lo puso en el EP Incurable, el rock y el folk los dejó para el LP Part Monster. Con esos antecedentes no esperaba este Ovations.

Lo que me sorprende no es que a Glen le gustara Dead Can Dance. Incluso compartieron productor y disquera por un tiempo (Writers Without Home y la banda sonora de Son de Mar aparecieron en 4AD, en 2002 y 2001), pero incluso así son grupos de órbitas distintas. Dead Can Dance, además de contar con voces magníficas, fueron grandes arqueólogos de tradiciones musicales, la auténtica World Music.

Brendan Perry además trajo a uno de sus secuaces, el percusionista Peter Ulrich. Los invitaron a bordo y acabaron secuestrando la nave: en "The Nightmare Goes On", "March of the Atheists" y "You Never Loved This City" Piano Magic suenan a unos improbables Dead Can Dance del siglo XXI. El resto del álbum, aunque tire a post-punk, quedó impregnado de su participación.

Aclaremos que Ovations lo promocionan con una pequeña trampa. Tiene de primer sencillo "On Edge", canción acelerada por ritmos sintéticos que suena muy diferente a las demás y no es lo mejor del disco.