3/09/2007

tome una paradoja al día

¿Ha estado el honorable lector alguna vez en un laberinto real, como el descrito por Herodoto? Todos nosotros hemos estado en laberintos de deudas, en laberintos de errores, en laberintos de disparates metafísicos. Pero yo hablo de laberintos literales. Pues bien, en Bath, en mi laberíntica infancia, había uno de esos misterios. Yo solía visitar ese misterio; y puedo asegurar que nunca he caído en la cuenta tan patéticamente sobre la fatal imposibilidad de reparar los errores cometidos en períodos tempranos de la vida. Tuerces equivocadamente al principio y todo se ha acabado, estás arruinado, es imposible recobrar el sendero correcto. O supón que tomas el correcto al principio, ¿qué importa? No puedes esperar ganar un segundo premio; poco después se te ofrecen cinco caminos distintos, la posibilidad de cometer un error se ha multiplicado; y suponiendo que otra vez logres acertar, un poco más adelante te topas con catorce opciones. ¿Qué te queda por hacer ahora? Si fueras una persona sabia, tirarte al suelo y llorar amargamente. (p. 319)

Lo paradójico es una cosa muy encantadora y, desde que dejé el opio, tomo una gran cantidad de ella en beneficio de mi salud. (p. 321)

Thomas de Quincey, "Las sociedades secretas".

3/07/2007

la escuela por la noche

Fuera de la carpa había grupos de personas que hablaban, y en el patio de la escuela se había instalado un vendedor de gaseosas con su tenderete. Los niños, que se habían pasado el día en la escuela, miraban por las ventanas del edificio. Eso me pareció una tontería, pero entonces empecé a preguntarme qué aspecto tendría mi clase de noche, así que me acerqué y, a la luz de la carpa, vi que los pupitres y todo lo demás estaba tan tranquilo como nunca había imaginado que pudiera estarlo una clase. Incluso algunos de los chicos y chicas mayores, los que iban con el señor Farney, miraban a través de las ventanas para ver el aspecto de su clase, y se decían entre sí que parecía encantada.

John Kennedy Toole, La Biblia de neón.

3/06/2007

a is for asia

A los 14 Jessica Steinhauser (Nueva Jersey, 1973), hija de un japonés y una alemana, ya había tocado el piano dos veces en Carnegie Hall. A los 16 era maestra de inglés en un colegio de Japón. A lo largo de su infancia y adolescencia llegó a ser la campeona de spelling de Nueva Jersey, perteneció a la Liga Nacional de Matemáticas, la Sociedad de Honor de Español y participó en las olimpiadas de Geografía, Artes y Matemáticas. Se hizo merecedora de la beca al mérito nacional tras obtener 1440 puntos en sus SAT's y actualmente tiene dos títulos, en negocios y japonés. Como buena nerd, forma parte de Mensa, la sociedad de los IQ más altos.

Por sentir que sus padres la presionaban demasiado en su carrera académica, Jessica huyó de casa a los 16. Se ganó la vida trabajando en bares de desnudistas y finalmente incursionó en el cine porno, donde fue una estrella desde 1993 a 2003, con el nombre Asia Carrera. En 2005, Jessica enviudó mientras esperaba a su segundo hijo. Ahora se dedica exclusivamente a criar a sus hijos y pasar tiempo en la red (creó su página web en 1996 y la actualiza personalmente desde entonces). No piensa volver a la industria porno, pero no tiene ningún mal recuerdo o rechazo hacia ella. "Créanme, no explotan a las mujeres, y nunca se ha comprobado científicamente que ver porno incite a cometer crímenes sexuales", afirmó la autonombrada "nerd del porno" en una entrevista del año pasado. Asia tiene un cameo en The Big Lebowski de los hermanos Coen y ha sido doble de cuerpo de Jennifer Tilly.

N. del Elfo: mi conocimiento de las leyendas del porno es más o menos el mismo que tengo de física nuclear, las hazañas de Asia Carrera me fueron referidas por el Héctor, una autoridad del área.