11/03/2015

decon/recon

Paula Temple hacía techno para consumo propio. Chris McCormack la conoció en un foro de internet y la convenció de publicar lo que hacía. Poco después John Peel y Jeff Mills tocaban esa música. Tan bueno fue el arranque que ella lo celebró dejando la carrera: los siguientes años los dedicó a proyectos comunitarios en Leeds. Fue echada, a traición, de la organización que había fundado y quiso saber si, diez años después, el mundo seguía interesado en el techno. El mundo le respondió que sí. En realidad el mundo ahora estaba interesado en todo y en cualquier cosa, siempre que supieras dónde y cómo presentarla.

Paula dejó Leeds por Berlín y creó su sello. Le preguntaron qué ideas tenía para este sello y ella dijo que A Cyborg Manifesto de Donna Haraway era importante en su ideario. Ese ensayo que examina a la humanidad usando al cyborg como mapa. Un cyborg que no teme existir "con identidades parciales y adoptando puntos de vista contradictorios". Eso dice el manifiesto de Haraway. "Damos prioridad a cuerpos e identidades hechas invisibles a pesar de su talento". Eso dice el manifiesto de Paula.

Ahora viaja con un supergrupo llamado Decon/Recon. Deconstruir y reconstruir. La alineación actual es la que grabó el EP Decon/Recon #1 (Noise Manifesto, 2015) y no se repetirá en próximas entregas. El término “supergrupo” lo estoy tomando de la tradición rockista, que no de la música electrónica. Llamamos así al grupo formado por músicos que ya eran conocidos con otras bandas. Pero Decon/Recon aspira a disolver la identidad de cada integrante. En esos tracks no debe quedar claro qué viene de cada parte. Más wikigrupo que supergrupo.

Reúnen sonidos en una carpeta. Cada uno toma de la carpeta y hace un track completo con eso. Los tracks no llevan autor individual, sólo se entiende que salieron de Decon/Recon. Ahí están, además de Paula, la británica Planningtorock, el sueco Olof Dreijer y la francesa rRoxymore. Es decir, hay dos que alguna vez colaboraron con The Knife y uno que formó parte de ese grupo. El EP es interesante pero no se compara con lo que consiguen en vivo.

Llenan una mesa larga con cacharrería digital. A ocho manos sueltan sonidos que los demás deben retomar, arropar y devolver para seguir el proceso. Ocurre al momento pero también es historia actualizada. Ya suena a lo que Sheffield aprendió del sonido de Düsseldorf. Ya suena a lo que Detroit aprendió de Sheffield. Ya suena a lo que Berlín aprendió de Detroit. De pronto rRoxymore trae algo más antiguo, de músicas de mediados del siglo XX. De pronto Planningtorock toma el micrófono y produce una voz andrógina del pop futuro. Se toma a tragos rápidos un destilado de décadas.

Esta gente está usando sus alias menos conocidos, para separar estas presentaciones de su trabajo previo. Los carteles de sus presentaciones en México hicieron, sin querer, mucho más por desdibujar su pasado. En los festivales Mutek y Cervantino se anunció una noche de electrónica alemana. Berlín es la base de operaciones, pero nadie del sello es originario de Alemania. Mucho más misterioso fue el cartel de la presentación en Monterrey. Sólo tenía los nombres de Paula Temple y el sello Noise Manifesto (y Lena Willikens, que canceló). Ni sus viejos alias, ni sus nuevos alias. Tampoco el nombre Decon/Recon. Así el Café Iguana de Monterrey tuvo su primer cartel que no decía por ningún lado el nombre del acto principal. Mira, tú: son las identidades parciales y contradictorias de Haraway.

9/23/2015

cosmic neighbourhood

Encontré esta música en el blog Found Objects. Ahí la describen como "música Moomin", o la banda sonora no de tu infancia real, sino de esa otra infancia que también tuviste. El sello Kit Records explica que esto lo hace Adam Higton en Bristol para acompañar sus ilustraciones de criaturas fantásticas. Si lo escuchas varias veces seguidas sí te crees que los músicos miden diez centímetros y llegaron montando golondrinas. Bandcamp / Deezer / Spotify

9/08/2015

24 millones de artículos académicos en acceso abierto

24,542,375 en este momento. Eso está disponible en la app CORE Mobile.

CORE (COnnecting REpositories) pretende reunir todos los repositorios académicos de acceso abierto. Para darnos una idea del crecimiento de estos repositorios, en enero de 2007 la OpenDOAR Database contaba 811 y actualmente tiene 2913.

También pueden usar CORE desde core.ac.uk y complementar lo que ahí encuentren con una busqueda en el Directory of Open Access Journals. Y para entender (o explicar) más sobre el acceso abierto, la introducción más sencilla es el libro de Peter Suber, ahora disponible en inglés y en español.

7/29/2015

el comedor y el robledo

Una anécdota de Stewart Brand en el quinto episodio de How Buildings Learn, pueden escucharla en el minuto 23 de ese video.

Mi amigo Gregory Bateson contaba una historia sobre las vigas del New College. Así la contaba. El New College fue fundado a fines del siglo XIV, y tenía, como otras escuelas de Oxford, un gran comedor con vigas de roble en la parte superior. Hace un siglo, un entomólogo examinó las vigas y descubrió que estaban llenas de escarabajos. Se lo contaron al consejo de la escuela, que quedó consternado: ¿dónde iban a encontrar vigas de ese tamaño? Un miembro del consejo sugirió buscar robles en los terrenos de la escuela, así que llamaron al guardabosques y le preguntaron si había robles. El guardabosques respondió: "verán, señores, ya esperaba que preguntaran eso". Descubrieron que al fundarse la escuela también se plantaron robledos para reemplazar las vigas del comedor cuando éstas estuvieran infestadas de escarabajos, porque todas las vigas terminan infestadas de escarabajos. Este plan había pasado de cada guardabosques a su sucesor durante quinientos años. "No cortes los robles, son para el comedor". Buena historia. Así se mantiene una cultura.

6/09/2015

utopía, a falta de madre

En el año 1830, cuando Enfantin era ya aceptado como el rector y jefe de la fraternidad saint-simoniana (de "la familia", como la llamaban por aquel entonces), recibió la visita de uno de sus miembros de nombre D'Eichthal. Éste, que acababa de venir de la catedral de Notre Dame, le contó a Enfantin que había tenido una iluminación y que sabía a ciencia cierta que "Jesús vive en Enfantin". Enfantin se dejó crecer la barba y, sin renunciar a las empresas canalizadoras de Saint Simon, parece que llegó a creerse la verdadera encarnación de Cristo. Enfantin reorganizó la "familia" saint-simoniana y creó una nueva religión cuyos más novelescos aspectos vuelven a revivir en la filosofía de Comte. Para los enfantinistas la nueva iglesia estaba organizada en forma bien simple: un padre —Enfantin mismo que ya se había diseñado un traje especial con las palabras Le Pére en el pecho— y una serie de apóstoles. Faltaba la madre. Enfantin se apresuró en buscarla sin llegar a encontrarla nunca... Pero si no lo encontró en la mujer, el principio femenino se le reveló en cambio en el Oriente. El canal de Suez, idea obsesiva de Enfantin, debía ser el símbolo de la unión entre el Oriente y el Occidente, ya que el Oriente, del cual Enfantin ignoraba todo, era sin duda el principio femenino que la tecnología ritual del Occidente mágico y masculino habría de fecundar. Enfantin no acabó mal. Acabó como miembro de la compañía de ferrocarriles Paris-Lyon-Méditerranée, entonces recién fundada.

Ramón Xirau, El péndulo y la espiral.